Vivimos en una época en el que de pequeños - al disponer de más derechos que deberes - si no hay una educación planificada y continuada estando en dicha edad, puede que no avancemos y sigamos con una claves de funcionamiento. El Yo & Ya. Es decir, queremos todo para mí - "egoismo" - y lo queremos ahora mismo - con "inmediatez".
Si no plantamos una semilla con este tipo de cosas, nos haremos adultos y seguiremos con dicha forma de ser y de actuar. Entonces, debemos enseñar el "nosotros" y una responsabilidad de disponer las cosas en base a una prioridad según el entorno, impactos y urgencia de las cosas.
A medida que crecemos los deberes van aumentando mientras que los derechos van disminuyendo en la misma medida. Todo ello, se podría cambiar, con otras dos variables. La libertad y la responsabilidad.
Es decir, cuanto más responsables somos, cuanto más asumimos la responsabilidad de nuestros actos, más libertad podemos obtener para actuar. Así, sembrando esta semilla, podemos creer y crear un hábito excelente.
Los que disfruten con la compañía de peques en su familia, verá como estas casuísticas se cumplen desde pequeños y los hechos se refrendan a medida que van creciendo. Por tanto, si no lo vas haciendo de forma paulatina, luego será difícil cambiar la forma de ser con la que estos han convivido desde años.
Si no plantamos una semilla con este tipo de cosas, nos haremos adultos y seguiremos con dicha forma de ser y de actuar. Entonces, debemos enseñar el "nosotros" y una responsabilidad de disponer las cosas en base a una prioridad según el entorno, impactos y urgencia de las cosas.
A medida que crecemos los deberes van aumentando mientras que los derechos van disminuyendo en la misma medida. Todo ello, se podría cambiar, con otras dos variables. La libertad y la responsabilidad.
Es decir, cuanto más responsables somos, cuanto más asumimos la responsabilidad de nuestros actos, más libertad podemos obtener para actuar. Así, sembrando esta semilla, podemos creer y crear un hábito excelente.
Los que disfruten con la compañía de peques en su familia, verá como estas casuísticas se cumplen desde pequeños y los hechos se refrendan a medida que van creciendo. Por tanto, si no lo vas haciendo de forma paulatina, luego será difícil cambiar la forma de ser con la que estos han convivido desde años.
Fráncamente bueno.
ResponderEliminarLa sencillez a veces nos puede sorprender. Gracias José María por tu comentario.
ResponderEliminarQue lastima que el compartir que se intenta enseñar desde pequeños, se olvide tan prontamente. Es una regresión la que se vive, donde se pasa del YO inicial, al NOSOTROS promulgado por los padres, para volver al YO originario que nos inculca la sociedad (¿o no es la sociedad?).
ResponderEliminarGran entrada como siempre, Nacho
Gracias Gonzalo.
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