"Sí quieres que el trabajo se haga bien, elige a un hombre ocupado; el otro tipo no tiene tiempo"
Parece que esto no tiene sentido pero muchos jefes, muchos responsables, sí quieren que se hagan las cosas, gestionan de esta forma. No es increíble. Piensas las cosas hay que hacerlas y lo importante es eso, lo demás no la tiene. Mal gestor.
¿Por qué? Porque es una forma de gestionar a lo corto. ¿Por qué no se encarga de pensar, analizar qué es lo que ocurre? ¿Por qué los otros no tienen tiempo? ¿Están haciendo algo? ¿O son unos inútiles y es mejor que no hagan nada?
Por tanto, la técnica es asfixiar al que trabajo y premiar al que no hace nada. ¿Qué les parece? Gran liderazgo ¿no creen? Esto pasa y además mucho. Porque eso que no tienen nunca tiempo sin totalmente improductivos. No saben hacer si alguna vez hacen algo a la vez. Y cuando tienen un poco de presión, se caen a las primeras de cambio.
Luego, sí el que hace, protesta; es el malo. El que quiere quitar el maravilloso ambiente de trabajo en el paraíso que algunos montan en sus chiringos. Y es así. Además se juntan estos últimos, hacen piñas para hundir si pueden más si cabe al que hace.
¿Cuánto puede durar esto? ¿Hasta el que hace aguante? ¿Y si este se cansa, se va, o le echan, quién va a hacer a partir de ese momento? ¿Se buscará a otro víctima para que siga otro vez la historia igual? ¿O el que debe liderar lo hará por primera vez algo?
¿Por qué? Porque es una forma de gestionar a lo corto. ¿Por qué no se encarga de pensar, analizar qué es lo que ocurre? ¿Por qué los otros no tienen tiempo? ¿Están haciendo algo? ¿O son unos inútiles y es mejor que no hagan nada?
Por tanto, la técnica es asfixiar al que trabajo y premiar al que no hace nada. ¿Qué les parece? Gran liderazgo ¿no creen? Esto pasa y además mucho. Porque eso que no tienen nunca tiempo sin totalmente improductivos. No saben hacer si alguna vez hacen algo a la vez. Y cuando tienen un poco de presión, se caen a las primeras de cambio.
Luego, sí el que hace, protesta; es el malo. El que quiere quitar el maravilloso ambiente de trabajo en el paraíso que algunos montan en sus chiringos. Y es así. Además se juntan estos últimos, hacen piñas para hundir si pueden más si cabe al que hace.
¿Cuánto puede durar esto? ¿Hasta el que hace aguante? ¿Y si este se cansa, se va, o le echan, quién va a hacer a partir de ese momento? ¿Se buscará a otro víctima para que siga otro vez la historia igual? ¿O el que debe liderar lo hará por primera vez algo?
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Tristemente es como indicas, existen tantos chiringos montados y que no quieren se muevan....Es muy fácil caer en la tentación de ponerse el uniforme del local y seguir con la misma actitud. Quizás si lo hubiera hecho antes, estaría en otro lugar. Pero no pienso claudicar jamas a mis principios. Entiendo y comprendo que en ocasiones hay que ceder en algunos, pero ello no significa renunciar. Soy de la creencia que a veces, hay que dar un paso atrás para tomar impulso. Lo de no retroceder jamas, me parece tan irreal...
ResponderEliminarPero una cosa es ceder en ocasiones y otra, convertirse en oveja...
Lo que no sé es como la gente puede poner sombrillas en la arena. ¿No crees? ....Gracias por el comentario.
ResponderEliminarEfectivamente, máxime en un terreno que sabe no será eterno, que puede y de hecho, cambia, cada dos por tres. ¿Por eligen estructuras tan inestables?. Pues quizás porque se sientan seguros. Igual es que de pequeños no leyeron el cuento de los tres cerditos....
ResponderEliminarSoplaré y soplaré y en conocimiento me transformaré ...
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