Motivación Intrínseca (Parte III)

¿Cómo fomentar la autonomía?

Según Fischman existen seis dimensiones que determinan el nivel de autonomía que puede tener un empleados en la empresa, siendo estas los límites que tienen dichos colaboradores. Veamos el empoderamiento que puede disponer un ejecutivo:

• Normas y Políticas
• Conductas del jefe
• Información
• Cultura
• Nivel de Competencia
• Nivel de Delegación

El primer paso para dar autonomía en la organización es entender el nivel de competencia y experiencia que tienen las personas que nos reportan.

A nivel de delegación es otro gran paso hacia la autonomía. Se puede disponer de las competencias necesarias pero como se quiere controlar todo, no se delega, por tanto, todo queda en manos del que gobierna o gestiona. De nuevo, si recuerdan en la entrada anterior, las decisiones se dicen que se toman en consenso pero el responsable tiene una cuerda que las gobierna todas. Como el anillo de tal película que todos conocen en la cual había un anillo que gobernaba a los demás.

Con respecto a las políticas y las normas estas pueden limitar la libertad de acción de los empleados. Cuando hay muchos controles, la burocracia emerge, se incrementan los trámites, y se disminuye la eficacia y eficiencia al realizarse las actividades que son propias. Pero, siempre debe haber un mínimo también de normas. El sentido común lo marca todo, como siempre.

Con respecto a la información, veamos una genial analogía que cuenta Fischman en su libro. "Si a usted le vendan los ojos para cruzar una habitación repleta de muebles, avanzará mucho más lento y tendrá mucha dificultad para elegir su camino". ¿Qué le ocurre al empleado cuando no dispone de la información necesaria y básica para realizar sus tareas? Pues que está con los ojos vendados. Y por ello, se reduce su autonomía, de modo que puede tropezar y recibir golpes en el camino. Sin información, el profesional no puede asumir responsabilidades. Pero también, con información no puede evitar no tomarla.

Al hablar de la cultura, puede que se transcienda de puertas hacia afuera que de forma corporativa hay una existencia de la misma y que se describa que en su formulación viene que todo personal puede disponer de la autonomía que requiera. Pero también puede que la realidad de puertas hacia dentro sea diferente. No hace falta describir más que ocurre y qué resultados luego se consiguen con esa forma de actuar y hacer.

Por último y gran importancia se puede hablar sobre sí el jefe es controlador o fomenta la autonomía. Solamente podemos ver acciones que podrían hacer y que representa dicha forma de gestionar. ¿Permite o tolera el error con honestidad? ¿Promueve un estilo horizontal? ¿Sigue las indicaciones de preguntar y escuchar más y hablar menos? ¿Involucra a las personas que serán afectadas por las decisiones? ¿Evita la microgerencia?

¿Cuántas más preguntas se podrían realizar? ¿Cuántos más ejemplos podrías describir con respecto a las seis dimensiones descritas? Seguro que en su larga o corta trayectoria profesional han visto o vivido muchas anécdotas propias y ajenas.

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