¿Para qué documentar lo que hacemos, lo que adoptamos en la infraestructura o actualizamos en la misma?
¿Para qué tener un control de nuestra demanda, de los proyectos y, de su actual estado?
¿Para qué tener controlados nuestros usuarios, sus equipos, el software que tienen instalado y licenciado?
¿Para qué controlar el estado de nuestras licencias y mantenimientos y sobre todo cuándo deben renovarse?
¿Para qué tener actualizado nuestro catálogo de servicio y las peticiones de servicio de nuestros clientes?
¿Para qué registrar las incidencias, las entregas, nuestros errores conocidos, los problemas y los cambios que se realizan en la infraestructura?
¿Para qué sirve tanta metodologías, marcos de referencias y estándares si como siempre lo único que hacemos es ser reactivos apagando fuegos cuándo nos lo requieren?
¿Para qué tener un control de nuestra demanda, de los proyectos y, de su actual estado?
¿Para qué tener controlados nuestros usuarios, sus equipos, el software que tienen instalado y licenciado?
¿Para qué controlar el estado de nuestras licencias y mantenimientos y sobre todo cuándo deben renovarse?
¿Para qué tener actualizado nuestro catálogo de servicio y las peticiones de servicio de nuestros clientes?
¿Para qué registrar las incidencias, las entregas, nuestros errores conocidos, los problemas y los cambios que se realizan en la infraestructura?
¿Para qué sirve tanta metodologías, marcos de referencias y estándares si como siempre lo único que hacemos es ser reactivos apagando fuegos cuándo nos lo requieren?
¿Cuántos para qué como estos podríais poner?
¿Cuántas páginas con ellos podríais ser capaces de rellenar?
¿Para qué, para qué, para qué?
Realmente, ¿todo esto sirve para algo? Mi respuesta rotunda es SI.
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