"Un hombre inteligente es aquel que sabe ser tan inteligente como para contratar gente más inteligente que él"
Ese hombre inteligente tiene un nombre, líder. No tiene miedo de que alguien con mayores capacidades de él, pueda jerárquicamente con el tiempo sobrepasarle. El creo en el equipo no en el grupo. Cree en cada una de las personas y su único objeto es sacar lo mejor de cada uno de ellos.
Pero:
¿Quién se atreve a comportarse de esta manera?
Muy pero muy pocos por eso, hay tan pocos líderes. Porque su meta no es él, sino su idea de hacer, de hacer responsable a la gente, de desarrollar su motivación para que ellos mismos se desarrollen profesionalmente y personalmente, enseñarles la visión y que sepan visionar, hacerles pensar y escuchar a otros.
Su ideal es la cultura, no el puesto. Su ideal es ver su obra no sus beneficios. Su ideal es hacer realidad su visión, con humildad, honestidad e integridad ante todo. Por ello, el que tiene miedo y trata su tesoro del puesto - como Smeagol, en el Señor de los Anillos - no tiene tiempo para idear este sueño. Y por ello, jamás será un líder.
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