Seguro que han visto la película de "Cadena Perpetua". Espectacular en muchos aspecto así como su aprendizaje siendo genial en alguna de sus escenas las frases que se detallan.
Les suena: "...estoy institucionalizado" cuando cada diez años pasan por un comité para ver sí les dan la condicional. Siendo paradójico, que cuando se dice que se ha rehabilitado no se lo conceden. Y cuando les indica, después de pasar más de media vida, que les da igual lo que hagan, se la permitan. O cuando, Tim Robbins, le cuenta al alcaide, la verdad de su historia - se la evidencia - y que el nunca debería haber entrado en prisión, diciéndole al mismo, "...cómo puede ser usted tan obtuso" ya saben lo que le ocurrió...castigo.
Pues esto ocurre lo mismo en la gestión de servicios. Muchos están tan institucionalizados y su productividad y generación de valor sí hiciéramos un límite cuando X tiende a infinito sería claramente de CERO. O bien, cuando se intenta hacer lo que uno cree, le aparecen muros de 100 metros de altura, como sí fuera una frontera, baliza o fortaleza del "reino de taifas". Y que hacemos, pues fácil, si aparecen datos o formas de hacer según manda los procedimientos o metodología pues cuál es la mejor solución. Pues clara, ELIMINARLOS.
Viva la mejora continua y viva aprender de los errores. Esto me lo comentaba un buen profesional, amigo mío, que cómo a veces, no se atreven a exponerlo por represalias de los responsables y caciques de esos grandielocuentes reinos de taifas, pues siempre aquí tendrá cabida. No por criticar, sino por ver que hay caminos y oportunidades para mejorar. Pero siempre que uno quieran. Por lo que dejen de vender que son ISO XXXX e ISO YYYY y demuestren a sus clientes y usuarios que realmente lo son, con hechos y evidencias en los servicios que prestan.
La verdad, que todo esto, me da una gran lástima ya que se vende y se publican en web y otros medio una gran cantidad de medias verdades y falacias que hacen bastante daño al sector y a la profesión. Pero como son los que mandan, pues para ellos. Si se creen sus propias mentiras alguna vez el mercado, hará de juez, y todo lo bien que se creen que hacen, alguien transmitirá la verdad y esos grandes reinos caerán con todo su fachada y explendor.
Hasta que ocurra, por lo menos, debemos tener los principios, ética y valores necesarios, para hacernos respectar e intentar hacer lo correcto, aunque a veces, nos pongan más zancadillas que debieran ser expulsados por dichas entradas para todo lo que quede de temporada.
Tristemente esto es así, Luis, nos pese mal que nos pese. La institucionalización es algo tan extendido y tan asumido que ya no se ve como tal. Es el telón de fondo de todo.
ResponderEliminarQuizás un cambio de escenario, o un cambio en el propio escenario sea lo único que se necesite, o quizas estemos abocados a repetir una y otra vez la misma obra, perdidos en una representación interminable y cada vez peor....