"De vez en cuando el jefe reestructura la empresa de pies a cabeza. Pero eso no es grave, ya que todo sigue igual que antes"
¿Esto es posible? ¿Lo que falla es el jefe? ¿La cultura adoptada y viciada de la empresa es lo que realmente hay que cambiar o adoptar? ¿Realmente sobran las personas? ¿Sólo sobran las viciadas o las institucionalizadas? Y por institucionalizadas no hablo de gente con cierta edad en la organización sino aquellos que están muertos profesionalmente y que no dejan ni hacen. Esto es lo que realmente sobra.
Pero para que un cambio profundo cale en el personal y en la organización, ¿realmente qué hace falta? ¿Las consabidas misión, visión,valores, estrategia y plan? Pues sí. Ya que cambiar por cambiar y sobre todo a lo corto, sólo hace que las mentes se apacigüen unos instantes para que cuando vislumbran que todo sigue igual que antes se vuelve a las andadas.
Hoy me decía un compañero en el cliente, es que esto es lo que hay, así que no profundices más ya que todo lo que hagas te va a dar igual. Y mi respuesta clarividente, entonces ¿tú que haces aquí? ¿Aprender a jugar a juegos de mesa? ¿A leer todo el día una subscripción de incompetencia? ¿A producir gasto en el cliente con tu falta de profesionalidad? La respuesta, no hace falta que te pongas así. La mía, sí fuera yo el cliente, dejaba contigo de perder dinero, haciendo una gran inversión: acompañarte a los tornos para siempre jamás.
Por lo que, todo es cultura, a la que hay que sembrar, supervisar, hacerla crecer y mimarla cada día. Ya que la más mínima dejadez hace que lo plantado jamás de los frutos apetecidos.
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